El proyecto de Ley de Vivienda que ha aprobado el Gobierno impondrá requisitos a los propietarios para iniciar el desahucio. Este hecho es considerado como un elemento que “supondrá una ralentización de los procedimientos legales para el desahucio de inquilinos morosos y el procedimiento civil en el caso de ocupación de viviendas vacías”, explica la entidad.
La norma, que entrará en vigor después de pasar por el Senado, “trae consigo un nuevo paradigma para el sector inmobiliario”, principalmente para los propietarios de viviendas en alquiler que hacen frente a impagos y están a la espera de un proceso de desahucio.
Esta nueva ley supone cambios en la Ley de Enjuiciamiento Civil que regula los procedimientos para la recuperación de las viviendas. Esta disposición impone “nuevas obligaciones a los propietarios de inmuebles a la hora de presentar la demanda para recuperar la posesión del inmueble”.
Se destaca que esta nueva norma “impone nuevos requisitos tanto a pequeños como grandes propietarios que supondrán una previsible dilatación de los tiempos de resolución de los procedimientos de desahucio en caso de impago, entre otros”. Añade también que en el caso de los pequeños propietarios, los nuevos trámites “no supondrán un gran impedimento, aunque los actores legales deberemos estudiar cómo acreditarlos de forma fehaciente sin que actúe en detrimento de los propietarios”.
Es por eso que para los propietarios del inmueble, el Seguro de Pérdida de Alquileres puede ser clave ante estas situaciones.
¿Qué es el seguro de impago y cómo funciona?
El seguro de impago es un contrato que se establece entre el arrendador y una compañía aseguradora para proteger al propietario en caso de que el inquilino no pague la renta. En este contrato, el arrendador paga una prima anual a la compañía aseguradora y, a cambio, la aseguradora se compromete a pagar las rentas impagadas durante un período determinado, así como los costos asociados con el desalojo del inquilino moroso. Para poder contratar un seguro de impago, el inquilino debe cumplir con ciertos requisitos establecidos por la aseguradora, como tener un trabajo estable y unos ingresos mínimos. Además, algunos seguros de impago pueden incluir servicios adicionales, como asesoramiento jurídico o protección frente a daños en la vivienda.
La nueva ley de vivienda y su impacto en los propietarios e inquilinos
La nueva ley de vivienda que entrará en vigor en España en los próximos meses tiene un impacto significativo tanto en los propietarios como en los inquilinos. Uno de los cambios más importantes es la ampliación del plazo mínimo del contrato de arrendamiento de tres a cinco años, lo que proporciona mayor estabilidad a los inquilinos. Además, la ley limita la fianza que los propietarios pueden exigir y prohíbe la exigencia de garantías adicionales. También se establece un mecanismo de control de precios para evitar el aumento abusivo de las rentas. Sin embargo, algunos propietarios se sienten perjudicados por estas medidas y temen una disminución de su rentabilidad y una mayor dificultad para recuperar sus viviendas en caso de impago o incumplimiento del contrato por parte del inquilino.
Ventajas y desventajas del seguro de impago para arrendadores e inquilinos
El seguro de impago puede ser una herramienta útil tanto para arrendadores como para inquilinos, pero también tiene sus desventajas. Una de las ventajas más obvias es que el seguro proporciona protección financiera en caso de que el inquilino no pueda pagar la renta o abandone el inmueble antes del final del contrato. Además, algunos seguros también incluyen asistencia jurídica en caso de que surja algún problema legal con el inquilino. Sin embargo, una desventaja importante es que los seguros pueden ser costosos y algunos arrendadores pueden optar por no contratar uno para ahorrar dinero. Además, algunos seguros pueden tener limitaciones y exclusiones, lo que significa que no cubren todas las situaciones posibles. Por otro lado, algunos inquilinos pueden sentirse incómodos al tener que pagar una prima adicional cada mes y pueden preferir buscar un arrendador que no requiera un seguro de impago.
En resumen, el seguro de impago puede ser una herramienta útil tanto para arrendadores como inquilinos, pero también tiene sus desventajas. La nueva ley de vivienda puede tener un impacto significativo en la relación entre propietarios e inquilinos. Es importante reflexionar sobre cómo podemos mejorar las condiciones de alquiler y proteger los derechos de ambas partes en el futuro.
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Fuente: Grupo Aseguranza